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Los senderos del trabajo clínico

$ 390 MXN


Autor: Lifshitz Guinzberg, Alberto
ISBN: 9789687620299
Edición: 1
Sello: Editorial Alfil, S. A. de C. V.
Colección:
Código: 9789687620299
Editorial: Editorial Alfil

La tradición médica jerarquiza el trabajo clínico como la mejor oportunidad profesional de ejercer una influencia directa sobre los pacientes y sus enfermedades. La visión arquetípica del médico, en contacto con el paciente, ubica su figura como el verdadero ejecutante de las aportaciones del progreso científico y tecnológico, a través de un conjunto de habilidades y destrezas complejas que no excluyen las de comunicarse con el enfermo y ganar su confianza. Los 2 500 años de historia médica poshipocrática han preservado cualidades fundamentales que se han puesto a prueba muchas veces y que han logrado sobrevivir precisamente por ser indispensables; a esta evolución se le han ido agregando también nuevos atributos y se han desechado los obsoletos, de tal modo que el clínico contemporáneo, si bien es identificable por sus cualidades características, es muy diferente del que ejercía la profesión hace no muchos años. El trabajo clínico se desarrolla, además, en una sociedad diferente, mucho más participativa y crítica, con mayor conciencia de sus derechos y en un ambiente que tiende a soslayar muchos de los valores y principios ancestrales. En el entorno de la atención médica han emergido los terceros pagadores, los administradores y los financieros, en un afán por lograr una organización más eficiente, pero consiguiendo a veces sólo obstaculizar el trabajo clínico. A partir del movimiento de la bioética se ha generado una amplia discusión en torno a la ética clínica que ha revitalizado esta disciplina, rescatándola de las ataduras del dogma, la tradición y la irracionalidad, para conformar una nueva visión que se vale de la lógica, respeta los valores y preferencias del paciente y encuentra respuesta aun para las situaciones inéditas. Este texto es una recopilación de escritos generados en los últimos años, algunos publicados en otras fuentes y otros inéditos, que aspira a propiciar en los lectores reflexiones sobre el trabajo clínico. Va dirigido a los médicos que cotidianamente atienden a pacientes, pero también a estos últimos, que son la razón de ser de los primeros y que deben tener mucho que decir sobre el trabajo clínico. Por supuesto que muchas de estas reflexiones no son de una sola persona, sino que han sido colectivas; otras proceden, advertida o inadvertidamente, de lecturas y, por lo tanto, son el resultado de la apropiación del pensamiento de otros. Expresar aquí los agradecimientos correspondientes sería una tarea incompleta y, por lo tanto, prefiero dejar una constancia genérica del reconocimiento a muchas personas en vez de detallar a cada una de ellas. Espero lograr la comprensión de todos por no haber incluido sus nombres.